Todo en ella es poesía: poesía cuando se detiene en esos rincones antiguos de la urbe donde todavía sobreviven los musgos y las humedades que el frío conserva en los resquicios y las cicatrices de los muros, poesía cuando de repente el sol aparece y se apodera de todo soplando arco iris desde las profundidades del cosmos helado.
En estas obras ha evitado los pasteles y los blancos secos invernales y opta por los colores primarios y encendidos. Son telas llenas de laberintos, perfiles fantasmagóricos, túneles, recovecos, vericuetos por donde pasa un viento explosivo que arrastra en sus agujas los colores interiores de la artista que, adolescente, empezó a trabajar en su natal Medellín en la escuela Laureles.
Esos colores desbordantes del trópico templado donde creció emergen en estas telas dedicadas a exorcizar el frío, la soledad, el silencio, la oscuridad, la bruma que París acoge durante los largos meses. Por eso esta colección lleva el nombre de invierno en Colores, que se acomoda perfectamente a la música poética que siempre la acompaña, heredera como es de autores delirantes como el chileno Vicente Huidobro y el colombiano León de Greiff.
En uno de sus cuadros, Llano en llamas, inspirado en el gran escritor mexicano Juan Rulfo, Ospina quiso "incendiar el invierno" y en otros como Seducción, Itinerario de un sueño y El Pasaje, deambula por las interioridades prendiendo fuego con antorchas invencibles de voces y palabras estridentes. Con esas teas de candela ella prende fuego a las telas y derrite el blanco de las petrificaciones.
Y con el fuego de sus lámparas y pinceles encendidos ilumina cuartos, habitaciones y buhardillas ocres y amarillentas que constituyen el vientre materno del artista que ama, desea y detesta al mismo tiempo la urbe luz congelada en la oscuridad.
Doris Ospina es candela de arte y sacerdotisa de los rituales del averno, porque nos dice siempre como el gran novelista Gustave Flaubert: "ahora con la mano quemada, podré por fin hablar de la naturaleza del fuego".
Por: Eduardo García Aguilar
